Duendes otra vez

Los duendes se aparecieron otra vez. Hoy me escondieron las ganas de esperar.
Tuve la extraña sensación de tener la espalda abierta y de ella mis ancestros escapando sigilosamente.
 Fue como si del viejo libro solo leyera páginas en blanco.
Sentí un gran hueco.
Fue en ese momento cuando con mis flores amarillas me decidí a llenarlo.

Hoy las puedes ver y si quieres puedes llevarte una y con ella un poquito de este sol.
Hazlo ahora( no se que estas esperando) mañana muy lejos estaré. El viaje se disfrazó de huracán y es inevitable no irme en el. Me lleva sin preguntas ni dudas.
En esta irremediable locura ardo en el calor universal.
Ya nada puedo hacer, al tardecer tormenta y sol.