enfrentamientos demoniacos me hacen comprender que nadie me sacará. que me pierdo y el camino de vuelta olvido. que no tengo juicio ni realidad alguna.
que no sé, yo no se
me confundo con los pajaros y caras en los árboles. Siempre
con su tentadora invitación de reposo. de ese estado que todos detestan y yo solo quiero.
fui por café y no encontre mas certezas. perdí la cabeza
inmóvil sentí el hielo congelándome afuera. muy a fuera del mundo. adentro mio, dentro de mi.
revolcandome en las sombras.
vacío: concedeme esta pieza... porlomenos dejame bailar
por favor que tenga algo de creatividad y alguna risa.
que si no es así ya no encuentro el sentido que pierdo a ratos aveces a meses.
de tanta arena en mi boca ya no salen mas palabras que cristales filudos que cortan y rompen y hieren y duelen y alejan y retuercen.
esque la ola estuvo enorme y difícil de capear. mas de cien vueltas hasta la orilla... y esperando el sol una nube grande me mojó.
bien merecido lo tenía. quién me mando a la playa ese día?
quien manda quien gana quien gana.
yo pierdo todo el tiempo.
yo me pierdo y no me encuentro.
me vi descubierta en la oscuridad. pedí a gritos que la luz prendieran que ya nada podía ver.
de a poco
me
desvanezco
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